UNA DILIGENCIA-CORREO CON PASAJEROS, DESPEÑADA POR LAS CUESTAS DE OROPESA, 7-3-1857.

GENTES, COSTUMBRES, FOLKCLORE, TRADICIONES, HISTORIAS, PATRIMONIOS Y PAISAJES DE LA PROVINCIA DE CASTELLÓN:

Por: JUAN E. PRADES BEL, “Crónicas”, “Humanidades”. (Proyecto: “ESPIGOLANT CULTURA": Taller de historia, memorias y patrimonios).

(Sinopsis): RECORDAR TAMBIÉN ES VIVIR… 

(Temáticas): LOS TRANSPORTES Y LAS COMUNICACIONES A LO LARGO DEL SIGLO S.XIX POR LAS CARRETERAS Y CAMINOS REALES DE ESPAÑA.

(Temáticas): DATOS PARA LA HISTÒRIA Y LA RECREACIÓN MEMORIAL DEL ANTIGUO CAMINO REAL O CARRETERA REAL DE VALENCIA A BARCELONA (ACTUAL CARRETERA NACIONAL CN-340).

"LA DILIGENCIA-CORREO DE LA CARRERA DE BARCELONA- VALENCIA POR LA RUTA DE LA COSTA, DESPEÑADA POR LAS CUESTAS DE OROPESA DEL MAR, 7-3-1857". 

Escribe: JUAN EMILIO PRADES BEL. ("Las historias escritas que me acompañan, me ayudan a pensar, a imaginar, a vivir, y a experimentar un mundo de vidas muy diferentes a la mía". J.E.P.B.).

INTRODUCCIÓN: El Real Decreto de 10 de junio de 1761 de Carlos III estableció crear en España una red radial estatal de Caminos Reales, con firmes y calzadas sólidamente construidas, aprovechando la red de caminos ya existentes a los cuales se mejorarían y se mantendrían por parte del estado, empezando a reformar la red de caminos existentes en caminos reales, inicialmente por los que llevan desde Madrid a cuatro de sus provincias: Valencia, Andalucía, Cataluña y Galicia. Poco a poco se fueron ampliando las comunicaciones de la red vial estatal de caminos reales, entre ellos el Camino Real de Tortosa a Valencia por el interior, una ruta histórica muy antigua abierta sobre y en paralelo al recorrido de la antigua vía ibero-romana litoral. Posteriormente, en 1800 se abrió el camino real de la costa, por la Venta Nueva (actual La Aldea) a Vinaroz, por el paso sobre un nuevo puente que se terminó de construir en el año 1800, por donde cruzar sobre el río Sénia (Sol de Riu), al paso del camino real se construyeron fondas y casas de postas, como la de San Carlos de La Ràpita o la de Alcanar, aún en pie y habitada en nuestros días, pegada a la N-340, Carlos IV y su familia, de regreso de Barcelona, pasó por el puente de "Sol de Riu" el 21 de noviembre de 1802. Después de la guerra de Independencia, se fueron mejorando poco a poco los firmes de los caminos reales, con la mejora de la calzada, las empresas de diligencias utilizando el sistema de postas aumentaron su velocidad, tirando de las berlinas con una recua de siete u ocho caballos rebajaron la carrera hasta las 37 o 38 horas de camino de Barcelona a Valencia por la ruta de la costa, era el tiempo que tardaba la diligencia en cubrir y recorrer la distancia entre las dos ciudades.

La alta velocidad que alcanzaban las diligencias de pasajeros tiradas por siete u ocho caballos al trote o al galope, era una experiencia que podía  conllevar cierto riesgo para la integridad física del viajero, puesto que era loable que por los medios y envergadura de tracción se pudiese sufrir ocasionales percances durante los trayectos. Uno de estos accidentes graves, lo contó a la gaceta un viajero que acaba de llegar de Barcelona en uno de los coches de la empresa de diligencias llamada “Las Catalanas”, refiriendo en primera persona sufrido, los siguientes hechos:

EXPOSICIÓN DOCUMENTAL: Gaceta de Madrid: núm. 1530, de 14/03/1857, página 4. INTERIOR. VALENCIA, 11 DE MARZO DE 1857.— Un viajero que acaba de llegar de Barcelona en uno de los coches de la empresa de diligencias llamada “Las Catalanas”, nos ha referido el siguiente hecho: «El sábado 7 del corriente, á eso de las once de la noche, al llegar á la bajada de la cuesta de Oropesa la diligencia, que al parecer no estaba refrenada por la traba, emprendió una desenfrenada carrera, siendo imposible al conductor y al zagal detener á los ocho caballos que la conducían. Viendo el primero el peligro inminente que le amenazaba, saltó del pescante quedando confiada al zagal la dirección del coche. En esto, observaron los viajeros del interior que por razón de la velocidad se había prendido fuego á las ruedas, y trataron de saltar al suelo, lo cual verificaron quedando uno de ellos tendido en el camino sin sentido á causa de una fuerte contusión que recibió en la cabeza. A los dos segundos de correr, el coche fue á chocar contra el paredón de la orilla derecha del camino que sirve de guarda-ruedas, abriendo un boquete de 30 palmos y precipitándose en el abismo que existe al pie de la montaña en una profundidad de 42 palmos, quedando separado del coche y á larga distancia el juego delantero con un solo caballo de lanza. De los otros, el uno rodó al abismo y los otros escaparon á causa de haberse roto la cadena. El coche quedó ruedas arriba, y los viajeros de la berlina, que milagrosamente no recibieron daño alguno, se hallaron en la angustiosa situación de no saber por dónde salir, al cabo lo verificaron con mucho peligro por un boquete. Pero aún es más maravilloso, lo acontecido á las dos personas que ocupaban la imperial, las cuales fueron despedidas de su asiento como era consiguiente, y les pasó por encima el coche; pero libraron la vida, merced á una porción de cofres que quedaron en la pendiente formando parapeto. Una señora que iba en el pescante fue despedida con ímpetu á una gran distancia, aunque tampoco recibió daño de consideración. Apenas se comprende cómo en esta fatal ocurrencia no haya habido que lamentar más desgracia que la de un viajero, qué habiendo recibido fuertes contusiones, fue conducido en una camilla á Benicasim, y trasladado desde allí á Castellón de la Plana, donde, examinado por los facultativos, han declarado que no ofrece cuidado. Para completar los detalles de este accidente, que tan lamentables consecuencias hubiera podido tener, debemos añadir que los viajeros fueron socorridos con el mayor celo por tres individuos del cuerpo de carabineros y una pareja de guardias civiles, de cuya eficacia y arrojo hemos oído los mayores elogios al viajero que nos ha referido este hecho. (D. M.).

ADDENDA: ADICIONES Y COMPLEMENTOS SOBRE LAS TEMÁTICAS Y MOTIVOS REFERIDOS EN EL ARTÍCULO. (POR JUAN E. PRADES):

ANUNCIO DE LA EMPRESA DILIGENCIAS LAS BARCELONESAS: VIAJE EN 37 HORAS, AÑO 1862. DILIGENCIAS DE BARCELONA A VALENCIA “LAS BARCELONESAS”. Diligencias-correos de Valencia “Las Barcelonesas”. Esta acreditada Empresa continúa saliendo todos los días á las ocho y media de la noche, haciendo el servicio en 37 horas. Desde el día 15 los precios serán los siguientes: Berlina, 100 reales. -Interior, 80 reales, y cupé 70 rs.-Encargos, 8 reales la arroba. El despacho continúa en la Rambla del Centro, n. 35, junto al pasaje Bacardí, á cargo del Administrador Francisco Doménech. (Diario de Barcelona: Año 1862, no. 352 (18 dic. 1862) Ed. Mañana).

BIBLIOGRAFIA,WEBGRAFÍA Y FUENTES DOCUMENTALES:

- Sebastián de Miñano (1826). Diccionario Geográfico Estadístico de España y Portugal. Imprenta de Pierart-Peralta, Madrid.

- Manual de diligencias para el año 1831. Imprenta de Don Miguel de Burgos.

- Juan Villuga, Pedro (1546):"Repertorio de todos los caminos de España: hasta agora nunca visto en el q[ua]l allará q[ua]lquier viaje q[ue] quiera[n] andar muy puechoso pa[ra] todos los caminantes co[m]puesto por Ped[r]o Juan Villuga vale[n]ciano, e impresso en Medina del Campo por Pedro de Castro, a costa de Juan de Espinosa, en el año 1546".

 -Gonzalo Menéndez Pidal, 1992: "España en sus caminos", Madrid, Caja de Madrid, 1992.

-Gonzalo Menéndez Pidal, 1951:  "Los caminos en la Historia de España",  Ediciones de Cultura Hispánica, Madrid.

- Townsend, Joseph (1791): Viaje por España.

- Pedro Rodríguez de Campomanes, Conde (1761): Itinerario de las Carreras de Posta de dentro y fuera del Reyno. De orden de su majestat Carlos III, Imprenta de Antonio Pérez de Soto, Madrid, 1761.

- Cavanilles, Antonio Josef (1795): Observaciones sobre la Historia Natural, Geografía, Agricultura, Población y Frutos del Reino de Valencia. En la imprenta real, Madrid, 1795.

ARCHIVO: DILIGENCIAS-CORREOS.

Diligencia de Alcoy, 1895.
El mozo postillón conduce y retiene
 del ramal a las caballerías
 hasta salir de la población,
momento en que el mayoral y este ponían
la diligencia en carrera.  

Diligencia, año 1919.

Diligencias Peninsulares, fundada en 1842,
tarifa y condiciones de los servicios de catering
 y hospedaje de los viajeros en carrera.

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Real Cédula de 1771, de los Caminos Reales. 

Oropesa del Mar, al fondo resalta la línea
 del antiguo camino Real
que se pierde hacia el Norte por el horizonte.

Diligencia de Alicante.

Antigua Casa de Postas.